Luego de cierre de 2023 polémico para Sam Altman y OpenAI, las cosas en la empresa más popular de Inteligencia Artificial comienzan a acomodarse de nuevo. Este viernes se dio a conocer que Sam Altman, fundador y CEO de la empresa, volvió a ser parte de la junta directiva de la compañía. A través de una investigación independiente encargada por la propia compañía, OpenAI dio a conocer que la conducta de Altman no fue un argumento de peso para sacarlo de la empresa, como se había mencionado en un inicio. El bufete de abogados que llevó a cabo la investigación dijo que entrevistaron a los miembros de la junta, a empleados de la empresa y revisó más de 30,000 documentos para llegar a la conclusión de que tanto Sam Altman como Greg Brockman, presidente de la empresa, son “los lideres correctos para OpenAI”.
Despido de Altman, a causa de pérdida de confianza
Como parte de la decisión, el presidente de la junta, Bret Taylor, anunció a tres nuevos miembros: Sue Desmond-Hellman, exCEO de la fundación Bill y Melina Gates; Nicole Seligman, exejecutiva legal de Sony; y Fiji Simo, CEO de Instacart. Con estas incorporaciones, la junta de OpenAI se compone de siete personas, incluido Altman. De acuerdo con la investigación del bufete WilmerHale, la razón detrás de la salida de Altman de la empresa, en noviembre pasado, fue una pérdida de confianza entre los miembros de la empresa y el empresario. “WilmerHale encontró que junta anterior implementó su decisión en un plazo abreviado, sin previo aviso a las principales partes interesadas y sin una investigación completa o una oportunidad para que abordara las preocupaciones”, dijo la empresa en un comunicado. En una llamada con un grupo de periodistas estadounidenses, Altman se disculpó por creer que un exintegrante de la junta de OpenAI estaba dañando a la compañía a través de sus acciones. Si bien no aportó más detalles al respecto, luego de su despido se informó que Altman tuvo una controversia con Helen Torner, quien era parte del equipo directivo, debido a un documento donde se criticaba la seguridad de OpenAI, así como los conflictos de intereses que representaban las inversiones de Altman en otras empresas. En aquel entonces también se mencionó que el despido de Altman se debió a las intenciones de ampliar la junta directiva, con el fin de restablecer la gobernanza de OpenAI. Además, destacó el hecho de que Microsoft, que se ha comprometido a invertir miles de millones en la empresa, quiere tener un asiento en esa junta ampliada.