chat.com: un dominio con historia
OpenAI, la empresa sensación de la Inteligencia Artificial generativa, gastó más de 15 millones de dólares por el dominio chat.com, el cual se registró en septiembre de 1996, haciéndolo uno de los más antiguos de internet. Sam Altman, director ejecutivo de OpenAI, publicó en X la dirección URL como confirmación de que el sitio pertenece a su empresa, pues a la hora de dar clic sobre él, se abre la página de ChatGPT. Esta dirección web cuenta con un historial de compras relevantes en el mundo de la tecnología. El año pasado se dio a conocer que el cofundador y director de tecnología de HubSpot, Dharmesh Shah, lo había comprado por alrededor de 15.5 millones de dólares.
OpenAI en camino a un cambio de nombre para su chatbot
“La razón por la que compré chat.com es simple: creo que la experiencia de usuario basada en chat es el próximo gran avance en el software. Comunicarse con computadoras a través de una interfaz de lenguaje natural es mucho más intuitivo”, escribió Shah para dar a conocer su adquisición. Sin embargo, luego de dos meses anunció que había vendido chat.com y si bien no dio cifras exactas de cuánto había cobrado por la transacción, esta semana confirmó que recibió más dinero del que había pagado originalmente. “Se revela el comprador del dominio chat.com por más de 15 millones de dólares y es exactamente quien uno esperaría”, comentó Shah en respuesta a la publicación de Altman en donde puso la URL. Aunque Shah no dio más detalles acerca de la transacción, en su publicación insinuó que la empresa no le pagó en efectivo por el dominio, sino que se trató de una operación que involucró acciones de la empresa en vez de dinero. Esta medida por parte de la empresa más importante de la IA actualmente no es casual, pues se está alienado a la pretensión de cambiar el nombre del popular chatbot y eliminar el sufijo GPT del producto. En septiembre pasado, el exdirector de investigación de la firma, Bob McGrew, dijo dijo que la nueva serie de modelos tendría el apellido “o1” como un primer paso hacia el cambio de nombres por unos “más nuevos y sensatos” con la finalidad de comunicar mejor el trabajo de la empresa. Aunque parezca un gasto superfluo, alrededor de 15 millones de dólares parecen no tener impacto sobre una empresa que el mes pasado se consolidó como una de las empresas privadas más valiosas del mundo (157,000 millones de dólares), al conseguir una recaudación de 6,600 millones de dólares Para esta ronda de financiación se atrajó a inversores de capital de riesgo como Thrive Capital y Khosla Ventures, así como al mayor patrocinador corporativo de OpenAI, Microsoft, y la nueva participación de Nvidia.