Claudia Sheinbaum , candidata presidencial de la coalición ‘Sigamos haciendo historia’ —que integra a los partidos Morena, del Trabajo y Verde Ecologista— sigue la línea de priorizar la conectividad como pilar esencial de su plataforma política, en consonancia con el legado del presidente Andrés Manuel López Obrador.
En su compromiso por cerrar la brecha digital que afecta a 25.3 millones de mexicanos, según datos de la ENDUTIH, Sheinbaum ha anunciado su propuesta de lanzar, en caso de asumir la presidencia, un nuevo satélite destinado a llevar servicios de internet a las regiones más remotas del país. El uso de satélites ha ganado relevancia en diversas áreas gubernamentales, desde seguridad hasta monitoreo climático y desastres naturales. Además, se ha convertido en una herramienta vital para cerrar la brecha digital. México cuenta con experiencia en la industria satelital, con satélites como Morelos I, II, III, Bicentenario y Centenario en órbita. Sin embargo, la administración actual ha dependido principalmente de empresas como Starlink de Elon Musk para proveer conectividad en áreas de difícil acceso, relegando estos proyectos satelitales nacionales. Aunque Sheinbaum no ha proporcionado detalles específicos sobre su propuesta de telecomunicaciones, se espera que busque reducir la dependencia de las empresas extranjeras integrando un satélite mexicano al sistema de conectividad. Sin embargo, enfrentará desafíos significativos, incluida la falta de un marco jurídico para la manufactura de satélites en el país, lo que requerirá una inversión considerable en la fabricación en el extranjero y los costos de lanzamiento y mantenimiento. Por ejemplo, el lanzamiento del satélite Júpiter 3 de HughesNet, el año pasado, requirió una inversión de 1,000 millones de dólares, y la Agencia Espacial Europea calcula que el costo total de construcción y lanzamiento de un satélite de comunicaciones puede llegar a los 500 millones de euros (unos 9 billones de pesos). Jorge Moreno Loza, abogado especializado en telecomunicaciones, señala que la propuesta de Sheinbaum refleja la continuidad del plan de cierre de brecha digital de López Obrador, pero destaca la necesidad de definir claramente los objetivos más allá de proporcionar internet, como impulsar la economía y la industria tecnológica. “No solo es conectar por conectar, se requiere de un propósito y hasta ahora este tema del satélite no explica las dimensiones que tendrá además de dar internet a las personas como buscar que esto incida en la economía, en las industrias o para el nearshoring”, comentó el especialista. La administración actual ha carecido de una agenda digital integral para incluir a más personas en la economía digital, y proyectos como CFE Telecom no han brindado detalles suficientes sobre su alcance nacional. De llegar a la presidencia, Sheinbaum enfrentaría el desafío de no solo conectar a los ciudadanos, sino también de impulsar un cambio significativo en la inclusión digital y el desarrollo económico del país.
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